El Foro de Debate Cádiz 2012 organizó un acto en el Oratorio de San Felipe Neri el jueves 6 de febrero con el tema “Cádiz, sede del constitucionalismo”.
El objetivo de la convocatoria fue avanzar en la implementación de las diversas propuestas presentadas ante la XXII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno celebrada en Cádiz, cuyas conclusiones fueron incluidas en el Libro de Actas y publicación del Libro Oficial de la misma.
Entre las citadas propuestas, figuran la designación de Cádiz como sede permanente del constitucionalismo, la creación y ubicación en Cádiz del Archivo Constitucional de los Estados Iberoamericanos y de la Academia Constitucionalista Iberoamericana, simultáneamente con la creación y ubicación en Cádiz del Archivo Constitucionalista del Reino de España y la Real Academia Española de Estudios Constitucionalistas. También el apoyo de la Cumbre a la designación de Cádiz como Patrimonio Mundial de la Humanidad.
En el acto presenciaron Benigno Pendás, Director General del Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, organismo dependiente del Ministerio de la Presidencia del Gobierno de España; Andrés Contreras, Presidente del Foro de Debate Cádiz 2012 e Ignacio Moreno, Presidente del Ateneo. Actuaron como ponentes Manuel Bustos, Catedrático de Historia de la Universidad de Cádiz y Vicepresidente de la Real Academia Hispano Americana de Ciencias, Arte y Letras de Cádiz; Miguel Revenga, Catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Cádiz y Presidente de la Asociación de Constitucionalistas de España; J. Alejandro Kawabata, Director de Políticas Públicas de la Secretaría General Iberoamericana SEGIB, si bien no tiene confirmada la asistencia en dicha fecha.
El tema de la sede del constitucionalismo figura en el texto y Adenda de la Declaración Cádiz 2012, suscrita por las entidades y asociaciones que figuran en el encabezamiento de esta comunicación. Han sido muchos los trabajos realizados en el desarrollo de las propuestas, numerosos los actos celebrados e intensas las gestiones desarrolladas, siempre puestas en conocimiento de las entidades y asociaciones, en el sistema por el que se han regido nuestras comunicaciones. El resumen de las actuaciones realizadas figuran en las comunicaciones de 9 de octubre de 2012, 26 de octubre de 2012, 22 de enero de 2013, 11 de abril de 2013, 14 de mayo de 2013, 2 de octubre de 2013 y 16 de octubre de 2013, a las que se debe acceder en nueva lectura para evitar repeticiones innecesarias. No obstante, se incluye en documento adjunto un guión resumen de las actuaciones.
Carta de Ignacio Moreno Aparicio, Presidente del Ateneo de Cádiz:
«Buenas tardes Illustrísimas Autoridades
Estimadas Señoras y Señores, amigos todos,
Nuevamente tenemos la fortuna de encontrarnos en este marco privilegiado por la Historia para reclamar lo que en justicia debería ser ya una realidad: que Cádiz sea declarada de iure lo que ya es de facto: sede del constitucionalismo español y una de las otras sedes internacionales del fenómeno constitucional. Pero lo que es imperdonable es que no lo sea todavía como una realidad para el constitucionalismo español e iberoamericano.
No voy a profundizar en las razones históricas, jurídicas o políticas puesto que tenemos presentes a unos ponentes de reconocido prestigio y solvencia intelectual como para dilucidar esta cuestión. A los cuales, quiero aprovechar para manifestarles públicamente mi admiración y afecto.
Pero sí quiero, en nombre y representación del Ateneo Literario, Artístico y Científico de Cádiz exponer algunas reflexiones desde nuestra visión cívica y de una institución que lleva desde el Primer Centenario de la Constitución de 1812 reivindicando la identidad constitucionalista de Cádiz y su talante liberal en el mejor sentido de la palabra. Ya en el siglo pasado fue el Ateneo el que insistió y removió obstáculos y trámites hasta lograr que el edificio en que nos encontramos fuese declarado Monumento Nacional por su significación histórica o fuera reconocida Cádiz como Ciudad Trimilenaria, actos que nos enorgullecen.
Un siglo más tarde, el Ateneo se ha adherido al Foro de Debate Cádiz 2012 con el idéntico objetivo que comenzó en 1912, que sea reconocido con hechos y de forma tangible el innegable carácter de Cádiz como ciudad Constitucional y su protagonismo nacional e internacional.
Nadie niega la influencia de la Constitución de 1812 para la historia de España y de aquellos otros países que la tomaron como modelo o referencia, del mismo modo que resultan innegables los efectos de la Declaración de Independencia de EEUU o la Declaración de los Derechos del ciudadano francesa. ¿Cuál es el complejo o la traba para que Cádiz ocupe el lugar que merece? ¿Qué más hace falta para que se materialice que Cádiz sea una verdadera sede permanente de estudios constitucionales y referente nacional en esta materia?
Desde el punto de vista de la sociedad civil, mucho se ha debatido sobre si el proceso constituyente de 1812 se hizo bajo la influencia de la idiosincrasia gaditana o a espaldas de ella. En mi modesta opinión, ninguna de las dos afirmaciones pueden ser absolutas. Cádiz era en 1812 una ciudad cosmopolita, avanzada intelectualmente y profundamente imbuida de las nuevas ideas, costumbres y sabores que entraban por su puerto. No resulta descabellado pensar que la mezcla de personalidades, diputados, emigrados y el pueblo llano gaditano produjese esa amalgama natural de intercambio de ideas y valores. No olvidemos que esos diputados y personajes refugiados en Cádiz convivían y residían en domicilios de gaditanos. No es posible pensar que esas vivencias, conversaciones e intercambios de opiniones no fuesen moldeando en algún porcentaje las ideas preconcebidas que pudiesen traer los diputados desde sus territorios de origen. Los diputados no vivían enclaustrados, formaban parte de un espacio urbano sumamente reducido y superpoblado donde era inevitable el contacto con la población residente anterior al estado de sitio. Y es imposible negar que en un espacio urbano tan pequeño, las noticias y opiniones no volasen en minutos de una punta a otra de la ciudad. Pruebas hay de las diferencias sonadas entre los regidores, las Cortes y la Regencia, cada una reclamando sus derechos legítimos. Es decir, no existían compartimentos estancos incomunicados. La sociedad gaditana no renunció a su propia personalidad a pesar de ser residencia de las Cortes y la Regencia así como miles de refugiados y militares.
Finalmente, y dadas las actuales circunstancias, no quiero dejar pasar la oportunidad de recordar que si de algo puede enorgullecerse Cádiz es de haber sido siempre la tierra de acogida de todos y para todos. Algunos sabrán leer entre líneas que seguimos defendiendo que una Constitución que igualó a los españoles de ambos hemisferios sigue teniendo vigencia aunque solamente haya españoles en un solo hemisferio en cuanto a las ideas de libertad, igualdad y fraternidad. El siglo XIX fue quizás un período de los más conflictivos, convulsos e inestables que haya vivido España. Ahora, en el siglo XXI, tenemos mecanismos y fórmulas más que suficientes para dirimir las diferencias y centrarnos en lo que nos une del mismo modo que se supo hacer en 1812. Igual que en aquella fecha, Cádiz sigue siendo un símbolo de la paz y la concordia del constitucionalismo español.
